[ Boda y celebración en Hotel Vincci Soma, Madrid. ]
Nos han engañado. A los hombres y a las mujeres, pero más a las mujeres. Tantas etiquetas, roles y cosas que tienen que hacer las féminas redundan en una labor que -hoy en día- se me antoja titánica. Nosotros lo tenemos algo mejor, pero se nos ha prohibido sentir, amar, llorar. Nos han prohibido la salsa de la vida y emocionarse sigue siendo síntoma de debilidad. El metrosexual mira al gentío desde la atalaya de su neutro y aséptico equilibrio emocional. El macho, mal, porque pega a su mujer. Y el sensible también mal, salvo si se es homosexual. (Por cierto: ¡qué buen trabajo ha hecho consigo mismo este colectivo!)
Rubén y Rebeca han hecho con su vida lo mismo que los homosexuales: han pasado de todo el mundo, se lo han puesto por montera y viven según sus propias reglas que ¡oh, albricias! contravienen no pocos tabúes: Rubén se hinchó a llorar, y siguió siendo un hombretón. Rebeca sacó su lado más sensual, y tampoco pasó absolutamente nada. Hicieron la boda en un hotel urbano, en vez de cena hubo cóctel, no hubo corte de tarta, trajeron a una drag queen, no salimos del salón… y nos lo pasamos de puta madre. Photocall incluido.
Éstos dos huelen a felicidad y frescura. A no salir porque chispea, a Fito y su vetusta guitarra, a rock sabio, a perros viejos y cervezas golfas a la luz de la luna. Huelen a actitud y aptitud emocional. Apestan a pasar la vida juntos y quererse desde dentro, con saña, empujando. A romperse mil huesos en el camino, darse la mano cuando estén arrugados, mirarse a los ojos y decir: “¡Wow! ¡Cómo ha molado el viaje, mi amor! ¿Hace otro?” Estos dos van en moto, literalmente: ¡¡Broummmmmm!!
Perdonad que os moleste con una canción letrada, pero es que es cojonuda. Como ellos. Otra muesca en la culata para Masyebra&Cruz con una magnífica versión de Ana Cruz que puedes ver aquí.
Disfrutad.
estás escuchando: Fito y los Fitipaldis – Las nubes de tu pelo
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Me encantan Luis, tus fotos siempre son geniales eso es no se puede discutir. Pero ademas el revelado que le has hecho a estas imágenes me gusta, son limpias no necesitan nada de artificio, se les ve tal y como son. Joo, si hasta yo me he emocionado viéndolas!!!
Besitos
¡Gracias Celes! La verdad es que sí: salvo alguna excepción, estoy acercándome a un estilo cada vez más limpio y natural. Me alegro que lo percibas… Mil besos!!
Dicen que un amigo de verdad es el que lo sabe todo de ti y aun asi te aprecia. Ana y tu habeis sacado todo lo que tenemos y habeis llegado a conocernos fielmente, por eso os considero mis amigos para siempre con vuestro permiso,hehehe se me olvidaba. Se me ha escapado alguna lagrimilla de alegria al ver las fotos.jajaja. mil besos y abrazos
Yo no lo sé todo de ti, querido Rubén, pero vive Dios que os aprecio mogollón. Es un honor ser considerado como vuestro amigo, porque gente así de verdad escasea, cagonlamar. Ana seguro que piensa igualito que yo. Enoooorme abrazo, preciosos!! P.D. Llorar es de machos; te lo digo yo, que lo practico con asiduidad. ;D
¡¡Ja, ja, ja, que bien nos lo pasamos!!. Gracias por capturar esos momentos. Besos.
De nada, “RebAca”. Vive Dios que sí…
je, je, je!! un fallo técnico al escribir…
muy muy lindas Luis!!! Desprender mucho amor y las ultimas super divertidas,todo muy completo,asi debe ser un reportaje!!!
Así es, Celina: completito, que sabe mejor. ;D ¡BESOS!
Me han encantado las fotos! Que pareja! Inspiran amor!
Gracias Veroa! Mil besotes.