Me gusta decir que no soy realmente un fotógrafo de bodas, sino más bien un cuenta-cuentos. Y no lo digo en broma. En gran parte de los reportajes de bodas que se hacen en España, los novios capitalizan la inmensa mayoría de las fotos tomadas, relegando el resto de elementos a un (casi) tercer plano. No es mi caso, me explico: En la práctica totalidad de los enlaces, los novios no solo se pasan meses -e incluso años- preparando su Gran Día, sino que los preparativos y la experiencia en sí es compartida intensamente con familiares y amigos. Ellos no son por tanto meros figurantes de la historia, sino que co-protagonizan algo muy bello, un gran hito en las vidas de la pareja.
De hecho, todo este follón no se haría si no es por “los otros”. Merecen por tanto su espacio, al igual que los detalles, las texturas, los entornos, las luces creadas a tal efecto… en resumen, LA BODA al completo y en mayúsculas. Con todo ese conjunto, mis reportajes pivotan sobre los novios, sí, pero es más bien el relato de una bella aventura (que tiene muchas caras) lo que me interesa contar. El contexto, por tanto, es capital y necesita un generoso espacio en el reportaje. De hecho, considero que un buen reportaje debería poder contar la boda solamente desde esa perspectiva.
Para ilustrar mi reflexión anterior, he decidido mostraros esta bellísima boda que ocurrió en un pueblo de Extremadura llamado Valdecaballeros (casi) sin mostrar a los novios. Éste es quizás el mejor legado que puedo dar a la gente que les quiere, los espacios que con tanta ilusión se crearon para la ocasión y las emociones que vivimos. La historia, esta vez, se cuenta por sí misma. Este brindis va por tanto por todos ustedes… menos por los novios. Con perdón.
Disfrutad.
P.D. Las uvas, con pepita por favor. Hay que saber afrontar los retos de la vida, y ésa es una excelente forma de encarar el año nuevo, ¿no os parece? ¡FELIZ AÑO A TODOS!
banda sonora: Christmas Time Is Here – George Winston
oaaaau!!!
Caramba, Nani… pues tú no andas coja tampoco. Encantado de conocerte.
Acabo de descubrir tu blog y me ha encantado tu trabajo, Felicidades.
Jorge, Xulio, Luismi: ¡SED BIENVENIDOS! Os deseo muchas, muchas bodas en 2011. ¡Démosle duro a las fotos y levantemos entre todos el nivel! Un enorme abrazo, “compañeros del Metal”. Masyebra
Pues que puedo decir, simplemente me quito el sombrero porque es una autentica maravilla todo. Ademas la idea es mucho mas que original, es una realidad y la plasmas increiblemente con tus fantasticas imágenes, son una fuente de inspiracion.
Felicidades y Saludos!!
De cine! Enhorabuena Luis, ya te tengo agregado a mi reader
para seguirte. Saludos!
Qué crack estás hecho! Una boda sin los novios, eh? Jejeje! Esta no la van a sacar en el Hola! 😛
Me ha encantado de la primera a la ultima, genial!, Feliz año 2011!
Hola Vanessa! Hola Xana!
Gracias por vuestrsas palabras. La verdad es que fue una boda espectacular. ¿Alguien se ha parado a pensar la MO-VI-DA que fue llevar toda esa boda a una finca perdida en alguna parte del medio del campo de Extremadura? Un esfuerzo impresionante…
WoWWWWWWWWW ! Esta si que me encanta!
Bueno primeramente feliz anño nuevo Luis!
También Taisa y Paco, ya me encantó vuetsro preboda en la saban extre,eña, y tenía ganas d ever el reportaje de boda y me he quedado sorprendida!
Esta si es de las mías, los centrso d ela mesas, los meseros, el panel de protocolo, el buffet de dulces…. me encanta! un 10! si señor.
Luis que bien que estabas tu para retratarlo, sin tu mirada no se apreciaría tan bella como es en todos los aspectos.
Besos
Brillante comentario y necesario. Al fin y al cabo, una boda no deja de ser el reconocimiento público de la unión de dos miembros de una sociedad. Todo empieza ahí. Suerte para los ya casados y felicidades al narrador por poner el foco en esos protagonistas tan imprescindibles y como olvidados.